Entrenamiento para triatletas: no olvidéis las transiciones
Después de haberos dejado la piel en cada entrenamiento de triatlón, seguro que no queréis perder ni un segundo en las transiciones, por eso también debéis practicarlas. Aquí tenéis unos consejos y pautas a seguir.
¡En sus marcas triatletas! ¿Preparados? ¿Listos?… ¡Ya! Seguro que os estáis ejercitando intensamente para la Garmin Barcelona Triathlon. Habéis mejorado la frecuencia de vuestra cadencia sobre la bicicleta, perfeccionado vuestra técnica de brazada y lo habéis luchado para rebajar vuestro tiempo en la carrera a pie. Después de haberos dejado la piel en cada entrenamiento, seguro que no queréis perder ni un segundo en las transiciones, por eso también debéis practicarlas. ¡Que no se os escape nada! ;)
Tras la natación, llega la T1, éstas son las secuencias de pasos que debes practicar. En primer lugar, debéis trabajar la forma en qué os deshacéis del neopreono: nada más salir del agua, desabrochad completamente la cremallera para poder sacar un brazo tras otro y, después, bajároslo hasta la cintura; cuando lleguéis la caja situada en el box, quitaros el gorro y las gafas de nadar y guardadlas en la misma para poder realizar dos tirones rápidos y secos que dejarán el neopreno, primero, a la altura de las rodillas y, segundo, a la de los tobillos; finalmente, realizad una elevación de rodilla y pisad el neopreno con el pie contrario y repetid la misma operación con el otro pie.
En segundo lugar, es importante dominar la técnica para subirse a la bicicleta en marcha, pero para esto previamente debéis haber dejado vuestras zapatillas, preferiblemente específicas para triatlón, correctamente fijadas con gomas sobre los pedales. Para colocaros sobre la bicicleta en marcha, debéis empezar a correr agarrándola con una mano por el sillín y, tras haber recorrido 20 o 30 metros, cambiar el agarre al manillar, esta vez con las dos manos; una vez en esta posición, cargad el peso sobre el pie contrario a la bicicleta para tomar impulso. Después de haber subido la pierna por encima del sillín, mirad hacia abajo y dirigid la punta de los dedos hacia la boca de las zapatillas, realizando un movimiento rápido para introducir las dos al mismo tiempo. ¡Ya podéis empezar a pedalear, pero no olvidéis de terminar de abrocharlas mientras lo hacéis! ¡Ah! Para realizar estas operaciones, escoged una carretera con cierto desnivel a vuestro favor, llana, ancha y, por supuesto, poco transitada 😉
Una vez superada el tramo de ciclismo, preparaos para la T2. ¿Cómo? Mientras todavía pedaleáis, desabrochad los cierres y sacad ambos pies para ponerlos encima de las zapatillas; tras haber llegado a la línea de desmonte, utilizad vuestra pierna dominante para soportar el peso y elevad la pierna contraria para pasarla por detrás del sillín; aminorad la velocidad y poned ese mismo pie a tierra; en este momento, podréis correr hacia el box agarrando el sillín de la bicicleta con una mano. ¿Un truco para esta transición? Utilizad cordones elásticos en vuestras zapatillas de correr y esparcid polvos de talco por la plantilla para favorecer la entrada de los pies.
Lo más importante es que tengáis todos los pasos claros y que lo hayáis practicado varias veces, uno tras otro. El día de la carrera, ¡no experimentéis! Ahora ya estáis preparados para todo… ¡mucha suerte y a por todas! 🙂 #YoHagoLaGarmin